Tú Eres el Villano

Pero Podrías No Serlo

Atención, pregunta de examen.

¿Qué es más importante?

A. Aumentar tus pensamientos positivos.

B. Disminuir tus pensamientos negativos.

Te dejo unos segundos para pensar...

¿Ya?

La respuesta correcta es la B.

Por mucho, además.

Todos los estudios al respecto apuntan en la misma dirección:

Reducir tus pensamientos negativos te reporta muchísimo más bienestar.

Que sí, que pensar en positivo está muy bien.

Ver el vaso medio lleno y sentirte motivado.

Venirte arriba por las mañanas y confiarlo todo a la motivación.

Peeeeeeero….

La mayor diferencia en tu sonrisa matutina no viene por ahí.

Sino en dejar de lado esa nube negra que nos asalta a todos.

Esos inoportunos e inesperados pensamientos autodestructivos.

Que aparecen en los momentos más insospechados.

Viendo la tele.

Haciendo la colada.

Conduciendo de camino al trabajo.

De repente y sin darte cuenta.

Empiezas a imaginar todo lo malo que te puede suceder.

Y lo que es peor…

Terminas asumiendo que va a ocurrir.

Te has dejado el fuego encendido.

Te van a echar del trabajo.

Tu mejor cliente te va a dejar.

O cualquier otra cosa.

Esa voz interna es el villano de la historia.

La autocrítica que nunca descansa.

Las creencias autolimitantes que jamás se toman un día de vacaciones.

Si sólo puedes hacer una cosa hoy, que sea esta:

Silencia esa voz interior.

Trátala como a un Gremlin.

Nunca le des de comer pasada la medianoche.

Porque siempre está más hambrienta cuando se acerca la hora de dormir.

Cuando estás más cansado.

Cuando tienes la guardia baja.

Cuando ya sueñas con soñar y sólo quieres dormir.

Es en ese momento cuando más te quiere y cuando más tienes que rechazarla.

Que te duela la cabeza.

Sí, lo sé.

Es difícil.

Yo soy cinturón negro, quinto Dan en auto tortura.

No ayuda tampoco que estemos diseñados al revés.

Que valoremos más lo malo que lo bueno.

La evolución nos ha hecho así de contradictorios.

Nos ha bendecido con un cerebro que busca nuestra felicidad y, al mismo tiempo, nuestra supervivencia.

Y para sobrevivir, evitar peligros siempre será la prioridad absoluta.

Aunque sólo existan en nuestra imaginación.

Tú ya sabes que el que busca, encuentra.

Así que no te queda otra que luchar contra tus instintos.

Encontrar la manera de no hacerte caso a ti mismo.

Y no permitir nunca que el vaso esté medio vacío.

¿Se puede?

Se puede.

¿Lo consigo siempre?

A veces.

Pero persevero.

Confieso que dormir con la mujer de mi vida ayuda.

Para que nos vamos a engañar.

Te leo.

Iñaki Arcocha

P.D: Si te gustan estas newsletters, compártelas con tus amigos en el siguiente enlace: https://arcochacapital.beehiiv.com/subscribe

P.D 2: Y si no te gustan, compártelas con tus enemigos para que se fastidien: https://arcochacapital.beehiiv.com/subscribe